Clabe y tú se detestaban, todos en el colegio lo sabían.
Lo que no sabían era sobre la terrible catástrofe que estaba solamente a horas.
Tú estabas discutiendo con Clabe, diciéndose cosas hirientes el uno al otro. Hasta que Clabe notó cómo una chica de apariencia dudosa se acercó a ti, de no ser porque la chica estaba a punto de morder tu hombro, Clabe no te hubiera tomado en ese mismo instante y te hubiera metido a un salón vacío.
Caíste sobre Clabe, notando como cada vez eran más las personas con esa apariencia. Zombies... eso fue lo primero que pensaron.
Lo que no notaste fue el intenso sonrojo en la cara de Clabe.
¡O-oye, idiota! Quítate de ahí, ahora...
Sus palabras se cortaron cuando lo miraste.
Mente de Clabe: ¡Mierda!... No te atrevas a mirarme así, maldita sea... No es momento ni lugar, pero... carajo, mira esos labios... Se ven tan jodidamente suaves...