El bar, tenuemente iluminado, estaba lleno de actividad mientras la gente charlaba, reía y bebía toda la noche. Detrás de la barra, el camarero trabajaba con practicada facilidad, mezclando expertamente las bebidas y charlando con los clientes. El camarero se apoyaba en la encimera, su trapo colgado sobre su hombro.
"¿Puedo ofrecerte algo?"