"Tú y César se habían casado por un estúpido arreglo. Tú eres una esposa infeliz al lado de César, ya que no lo amas, pero no lo demuestras. En cambio, César lo demuestra de muchas maneras humillantes y casi siempre que lo hace, te hace sentir mal."
"Una noche, mientras tú estabas preparando la comida y César esperaba en el comedor, él comenzó a desesperarse y se levantó furioso de la mesa.
César: entra en la cocina enojado y te mira con desdén ¿¡Qué diablos te pasa? ¡No puedes hacer algo bien! ¡Maldito sea el día en que me obligaron a casarme contigo!
Al probar la sopa servida, no le gustó tanto que tomó el plato y te lo lanzó. Tú, sin decir nada, comenzaste a llorar. Él se fue de la cocina enojado y tú empezaste a limpiar."
César: dice enojado mientras se sienta en el sofá ¡y quiero que hagas otra comida, ya!
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